Gran Lago

El chico alzó una ceja, un tanto perplejo, primero, por la frase que había dicho, y luego, por la petición. Matt ll consideró un segundo, no solo porque era algo más bajito que ella, sino porque no estaba acostumbrado al contacto físico y de cierto modo lo consideraba una falta de respeto. Pero ella se lo estaba pidiendo, y al parecer era muy necesario. Así que, suspirando, confió en su fuerza física y se acercó a la chica. Lentamente la tomó entre sus brazos y la condujo nuevamente hacia la mitad del lago, sumergiéndola casi por completo, dejando únicamente su cara descubierta, para que se curara. El agua fría hizo que se erizara inevitablemente.

Su cuerpo no se inmutó ante el toque helado del agua al rodear la completamente menos, gracias a Matt, su rostro. Después de determinado tiempo sus ojos se abrieron repentinamente y se clavaron en los celestes del Setan, de los labios de la mujer apenas se dibujo una sonrisa antes de que su cuerpo se desvaneciera por completo. No, no se había desintegrado, no había muerto o vuelto invisible, tan solo se había convertido completamente en agua y se mezcló con la del Lago. Lo que pareció, tal vez, quien sabe si no, una larga espera concluyó cuando la cabeza de la mujer emergió de las profundidades a unos escasos centímetros de quien la acompañaba.

- Gracias - le dijo con una sonrisa perlada que emitía ternura - Así que... ¿que fue de ti durante este tiempo? - su voz sonaba fluida y tranquila, se notaba que ya había recuperado toda la energía y que sus heridas habían sanado, o bueno casi todas.

Cuando Amy se volvió una con el agua, Matt se dio el placer de sumergirse por completo, dejando que el agua fría le llenara por completo. Le encantaba nadar, sobre todo cuando era contra corriente, llevando la contraria a todo, como siempre.
Acto seguido, cuando minutos después se quedó sin aire, volvió a la superficie y prestó atención a Amy, viendo aliviado que ella ya estaba mejor.
-¿Conmigo? Nada importante-Alzó los hombros, no estaba dispuesto a hablar de como tuvo que asesinar a su mejor amigo. De pronto recordó otra cosa-Opeth me obligó a ir a un intercambio cultural con otro clan... Detesto que me obligue a socializar -Rodó los ojos, fastidiado.

No era ella la que se mantenía a flote agitando sus pies, mas bien era el mismo agua que la impulsaba hacia arriba para mantenerle la cabeza en la superficie. Amy leyó perfectamente la postura corporal que Matt había adquirido , no iba a preguntar ni idagar sobre el tema que él le ocultaba, tampoco era de su mera urgencia.
- ¿El de los Ardars? - pregunto después de un rato de silencio.

El muchacho asintió lentamente, mientras volvía a sumergirse en la frialdad del invierno.
-Igual enviaron a Chaos, se veía realmente disgustado-Rió un poco, Chaos siempre había sido un buen amigo suyo y ambos habían protestado enérgicamente... Sin resultados, por supuesto, el segundo al mando no aceptó quejas-Solo porque a Hannibal le guste viajar...

Ella río por lo bajo coreando la risa del Setan y negó con la cabeza. En cierto modo a ella tampoco le gustaba socializar demasiado ya le era dificultoso hacerlo con los del Clan del Sur, los Kolmsinsus, no se podía imaginar si tenia que ir a otro mas si era obligada.
- Vamos, tal vez sea divertido y te cruces con alguien conocido - le animo omitiendo la parte en que ella estaría ahí durante él intercambio, sabiendo que lo tenia a él mismo como adjunto.

Alzó los hombros haciendo un gesto de disgusto, pensando en como ocuparía su tiempo... Quizá entrenaría, o buscaría algún nuevo maestro, dado que Durza ahora estaba ocupado en otros asuntos, y que prácticamente se la pasaba aislado fuera de todo contacto con el mundo exterior.
-Si, es posible. De alguna u otra forma intentaré buscar a Chaos, aunque seguramente tanto él como Hannibal estarán con sus citas-Bufó con desgano.

- Vamos que no va a ser el fin del mundo que te hagas nuevas amistades y te desprendas un poco de Hannibal y Chaos - sonrió - a demás hay muchos lugares lindos en Argrios, podrás conocer muchas cosas e incluso podrás entrenar contra las criaturas del lugar - le animo. Ya había estado mucho tiempo en las frías aguas por lo que de había recuperado por completo. Con un solo movimiento el agua la impulso a la orilla , en donde se sento mirando a Matt, en aquel momento vestía nuevamente su prestado vestido Griego mientras que su cabello estaba recogido en un rodete.

-Son mi familia-Arrugó la nariz, en ese momento dejó de ser Beltza y volvió a ser Matt, un chico con mal carácter y un tanto berrinchudo al que no se le cumplía un capricho-Puedo entrenar con cualquier criatura... He domado a muchísimos Otamis. Además no creo que los habitantes estén felices con que mate a sus animales-Alzó la ceja.
A diferencia de Amy, el prefirió permanecer en el agua, aunque fuera unos minutos más para cumplir con su rutina diaria.

Ladeó la cabeza y le clavó la mirada, tenia el ceño fruncido y una ceja alzada.
- ¿Otamis? - pregunto algo confundida, la verdad es que nunca había escuchado aquella palabra, y en el caso de ser criaturas: nunca antes las había visto. Se encogió de hombros al escuchar lo siguiente - Suelen haber torneos y 'juegos' para entrenar, eso si se le tiene prohibido el uso de poderes a los invitados si es que éstos se enfrentan con Ardars - desvió su mirada a un punto especifico del lago y allí el agua empezó a 'saltar' para diversos lados-

Matt chasqueó los dedos, y, de la nada, apareció justo en la orilla del lago un inmenso gato, del tamaño de un lobo grande. El animal lanzó lo que parecía ser un gruñido.
-El es Galder, un Otami. Son criaturas de otra dimensión, las puedo llamar para que me ayuden en mis batallas-Curioso era que su enorme gato se llamara Galder, cuando ese era el nombre del clan enemigo de los Setan. Matt lo recordaba especialmente por porque durante una batalla contra ellos lo había invocado por primera vez.. Matt retomó la última afirmación de Amy-No necesito poderes-Dijo con un tanto de arrogancia-Me especializo en combate cuerpo a cuerpo.

Sus ojos se abrieron de par en par al ver a tal inmenso animal con apariencia felina. Con un ágil movimiento se paro y quedo quieta, viendo las reacciones del gato a tal inesperado movimiento. Dio unos cuantos pasos y se detuvo a una distancia conveniente, miro a Matt esperando algún asentimiento de su parte o negación a sus futuras acciones: tocar al felino.

-Aquí, Galder-Le dijo Matt, haciendo un movimiento de cabeza. El animal dejó ver que era el equivalente a un tigre en el universo humano: Con un gran salto, se echó al agua y nadó, yendo hacia su amo y ronroneando.
Beltza se montó encima suyo, era una escena un tanto graciosa, el chico se veía casi diminuto sobre la bestia, que empezó a nadar hasta que llegó a Amy.
-Anda, tócalo, no te morderá-Le dijo mientras acariciaba la cabeza del enorme felino.

Su mirada siguió los movimientos del Otami. Amy en verdad estaba fascinada y era algo que cualquier felino causaba en ella aun cuando ya los había visto, era capaz de quedarse horas sentada mirando como un gato dormía plácidamente o con alegría al ver como dos cachorros jugueteaban. Cuando él animal llego en frente suyo con Matt sobre su lomo ella tan solo extendió su mano para que él felino la.oliera y, después de unos segundos, le acaricio el menton.
Entonces sonrió de lado al acordarse de las anteriores palabras de Matt que habían quedado en el aire, ' me especializo en combate cuerpo a cuerpo'
- Te han entrenado perfectamente - le dijo Rogué sin siquiera mirarle ya que sus ojos estaban puestos en la hermosa criatura.

El felino ronroneó cuando la mujer lo acarició, como si fuera un pequeño gato más que una inmensa bestia. Si bien Garossis era la criatura que más acostumbraba convocar, sin duda alguna Galder se había vuelto más su mascota que su arma, al igual que Taddeus, su hermano, que había pertenecido a Chrono por obsequio de Matt.
-¿A quién le dices?-Alzó la ceja el chico ante la afirmación de Amy-Si te refieres a mi, sí, el entrenamiento con el señor Durza siempre fue muy duro... pero dejó sus frutos. Y si le hablabas a Galder, nos hicimos compañeros en nuestras misiones

Sonrió de lado.
- A ti, me diriguia a ti - le mensiono en vos baja, casi susurrando. Alzo la mirada y miro ligeramente a Matt sobre él tremendo felino mas apartó la vista con rapidez al darse cuenta que le miraba fijamente. Algo avergonzada clavo su mirada en Galder y le volvió a hacer caricias en él mentón, tratando de pensar en otra cosa. Y la verdad no le fue difícil ya que no habían pasado ni cinco minutos y su mirada se perdió en los ojos enormes del felino, concentrada en lo que le decían por la mente ni siquiera se atrevió a pestañar - tengo que ... Irme - susurro cada vez mas bajo, en su rostro la sorpresa por la repentina charla mental se hacia cada vez mas visible. Alzo la cabeza y esta vez clavo intencionalmente su mirada en la del Setan, esbozo una débil pero cálida sonrisa - ojala nos veamos pronto - le dijo antes de voltearse y desaparecer entre una cortina de agua.

Matt sin duda alguna vio como la chica lo veía, por lo que alzó una ceja aunque decidió no decir nada, al fin y al cabo le habían enseñado en que no se metiera en sus asuntos. Acto seguido, ni siquiera le dio tiempo de despedirse de Amy, simplemente había desaparecido. 
Beltza, perplejo, alzó los hombros y mandó a Galder nuevamente a su dimensión, mientras se disponía a seguir entrenando... sin embargo no pudo, la marca del caos lo llamó, sabía que debía irse. Así que, bufando, lanzó un conjuro y desapareció.